A menudo el diagnóstico de un cáncer se presenta por sorpresa y no es fácil asumir la noticia.  Actualmente se ha avanzado mucho en el tratamiento y, por lo general, ya no se considera una enfermedad mortal. Pero siempre pueden surgir dificultades, por lo que contar con apoyo emocional durante la enfermedad puede ayudar a mitigar el impacto. Además, el estado de ánimo del paciente influye mucho en la actitud con la que afronta la enfermedad. Por lo que sentirse acompañado durante este proceso es fundamental.

Sin embargo, hay personas a las que les cuesta contarlo o pedir ayuda, y siempre hemos de respetar su decisión. Pero se ha observado que también hay pacientes que desearían tener este apoyo pero no saben a quién acudir. Por este motivo, se puso en marcha el programa Primer impacto, que la Fundación Dexeus Salud de la Mujer lleva a cabo en colaboración con la AECC –Asociación Catalunya Contra el Cáncer de forma completamente gratuita.

Su objetivo es ofrecer atención psicológica, tanto a pacientes que han sido diagnosticados recientemente de un cáncer como a sus familiares, para que puedan contar con ayuda profesional si la necesitan. Porque la necesidad existe. De hecho, un estudio reciente realizado por la AECC a pacientes que han finalizado un tratamiento oncológico –“Necesidades actuales y futuras de los pacientes oncológicos y sus familias en Cataluña”– indica, precisamente, que una tercera parte de ellos echa en falta este apoyo emocional profesional y más información general sobre aspectos que afectan a la calidad de vida, como la práctica de ejercicio físico o la sexualidad.

¿En qué consiste?
El programa “Primer impacto” ofrece una primera visita al paciente en el momento del diagnóstico para valorar si se está adaptando a la situación que está viviendo, y que conozca el servicio. Las visitas son personalizadas y ofrecen un espacio de acogida y diálogo en el que los pacientes y familiares pueden hablar abiertamente de cómo se sienten y de los temas que les preocupan: cómo explicarlo a los hijos o en el trabajo, cómo va a afectar a su aspecto físico o a la sexualidad, cómo se está adaptando al tratamiento…

Sandra García Lumbreras, psicooncóloga de la AECC, que ofrece estas sesiones de apoyo en nuestro centro explica: “a muchas personas les preocupa más el impacto que la noticia pueda tener entre sus seres queridos que cómo les afecta a ellos mismos”. Y a veces dudan de si explicarlo, sobre todo a los hijos si son pequeños o a sus padres si son mayores, para no hacerles sufrir. Pero es importante no ocultarlo a las personas del entorno más directo, ya que si hay que seguir un tratamiento que puede afectar al aspecto físico o cambiar de hábitos es importante que se conozca. “Si los familiares perciben cambios que no se han explicado, se pueden generar más miedos o inseguridades, y crear situaciones que hagan más difícil sobrellevar el proceso”.

La psicooncóloga García indica que “la visita también ayuda a poner nombre a los propios sentimientos”. La sensación de incerteza, inquietud y el miedo, la tristeza, la rabia e incluso culpa por no haberse cuidado más o por crear un problema a la familia, son muy frecuentes. Todos ellos son completamente normales. “Pero es importante reconocerlos y saber cómo afrontarlos cuando se presentan”.

Otro aspecto que se valora en estas sesiones es cómo puede afectar la noticia a la vida cotidiana y al cuidado de uno mismo. Por ello en la primera visita hay que responder a un breve cuestionario que incluye preguntas sobre hábitos de sueño, cambios en el apetito, ritmo de vida, humor, capacidad para descansar, distraerse o relajarse. Por ejemplo, si hay problemas de insomnio y se necesitara medicación, se le puede derivar a otro especialista.

En general, el seguimiento que se hace a cada paciente y la regularidad de estas sesiones varía en función de sus necesidades, estado de ánimo, evolución y la valoración que hace el profesional en cada caso. “No hay ninguna obligación de continuar las visitas por parte del paciente. Se trata solo de hacerle saber que cuenta con apoyo y que, en general, esa ayuda siempre resulta positiva para afrontar el proceso y sentirse mucho mejor”, explica la psicóloga García

Si no eres paciente de nuestro centro, pero quieres ampliar la información sobre el programa “Primer impacto”  puedes contactar directamente con la AECC.