Una de las cosas buenas de cumplir años es que te conoces mejor y aprendes que es importante dedicar más tiempo a una misma. Sin embargo, en nuestra lista de obligaciones diarias el cuidado personal no suele ser una prioridad. Así que, con motivo del día internacional de Acción por la Salud de la Mujer, que se celebra esta semana, hemos elaborado un check-list de buenos consejos.

Tu check-list de salud

A los 20

  • Si nunca has ido al ginecólogo, pide hora. Es útil para hacer una primera valoración de tu salud sexual y reproductiva y consultar dudas. A partir de los 25 años se aconseja realizar una revisión ginecológica anual que incluya exploración mamaria y citología.
  • Protégete contra el virus del papiloma humano (VPH). Si no te has vacunado, ahora es un buen momento. Esta vacuna es útil para prevenir el cáncer de cuello cervical. Consulta a tu médico
  • Ponte al día en anticonceptivos. Hay nuevos productos en el mercado que quizá no conoces y te pueden interesar, como las pastillas que permiten menstruar solo 3 o 4 veces al año.
  • No bajes la guardia frente a las ITS. Si has mantenido relaciones sexuales de riesgo, hazte pruebas para detectar posibles infecciones de transmisión sexual (ITS). A menudo no provocan síntomas. Pide información a tu ginecólogo/a para que te explique en qué consisten estos test.

A los 30

  • Pide una valoración de tu reserva ovárica. Se puede hacer a través de una ecografía y una analítica de la hormona antimülleriana. Aporta información sobre las posibilidades de ser madre en el futuro, lo que permite anticiparse a posibles problemas y actuar en consecuencia.
  • Si quieres ser madre, haz una visita preconcepcional. Es muy recomendable. Normalmente se hace una analítica y se evalúa tu historial. También te aconsejarán que tomes suplementos de ácido fólico y yodo para prevenir que el bebé nazca con defectos congénitos. Tu médico te indicará el tiempo que debes tomarlos.
  • Un buen momento para congelar tus óvulos. Si no tienes pareja y/o no te planteas ser madre a corto plazo, pero no lo descartas, infórmate sobre esta opción. Se aconseja hacerlo antes de cumplir los 36 años.
  • Tonifica tu suelo pélvico. Es fundamental tras el parto. Pide consejo a tu fisioterapeuta y a tu ginecólogo/a. Ellos te indicarán cuándo es el mejor momento para empezar.

A los 40

  • No te olvides de tu mamografía anual. Es una prueba de imagen por rayos X que permite diagnosticar cualquier patología en la mama, y especialmente sensible para detectar el cáncer de mama. A veces es necesario complementarla con una ecografía mamaria.
  • Si quieres ser mamá, no pierdas el tiempo. Pasados los 40, la posibilidad de lograr un embarazo espontáneo es de menos de un 5%. Infórmate bien y elige la opción que te ofrezca más posibilidades.
  • Más atención a tu dieta y más ejercicio. Si quieres evitar que la menopausia te pille desprevenida y con sobrepeso, es un buen momento para empezar a adoptar buenos hábitos de estilo de vida.
  • Anticonceptivos. Muchas mujeres que ya no desean tener hijos optan por un método mecánico de larga duración, como el DIU. Pero si no fumas y no tienes problemas de salud cardiovascular puedes prolongar unos años más el uso de anticonceptivos hormonales. Pide información.

A los 50

  • Cuida tu salud cardiovascular. Controla tu colesterol y tu presión arterial de forma regular, evita ganar peso, tonifica la musculatura y aliméntate de forma saludable.
  • Hazte una densitometría. A partir de los 50 se acelera progresivamente la pérdida de masa muscular y ósea. Es una prueba indolora que permite determinar la densidad mineral de los huesos y, así, diagnosticar la osteoporosis o valorar el riesgo de fracturas.
  • Terapia hormonal sustitutiva. Si ya ha pasado un año desde tu última regla, y tienes sofocos u otros de los síntomas que se asocian a la menopausia, consulta con tu ginecólogo/a la posibilidad de realizar un tratamiento hormonal (TH) u otros tratamientos que contribuyan a mejorar tu calidad de vida.
  • Tratamientos antiaging. Si la zona vulvar y vaginal presenta problemas de atrofia se pueden realizar tratamientos a nivel local, mediante la aplicación de ácido hialurónico o del láser, que favorecen la regeneración de la piel de la zona genital y pueden ayudar a ganar tono muscular. Existen otros tratamientos útiles como la carboxiterapia o el plasma rico en plaquetas. Pide información a un especialista

A partir de los 60

  • Haz ejercicio cada día. Nadar y caminar son dos buenas opciones. Evita los deportes de impacto como correr, que pueden favorecer el desarrollo de problemas como la incontinencia urinaria o el prolapso genital, por falta de tono en el suelo pélvico.
  • Cuida tu higiene íntima para evitar las infecciones vaginales, que son más frecuentes a partir de esta etapa. 
  • No te aísles y practica aficiones. Mantener una vida social activa y realizar actividades que te resulten estimulantes hará que te sientas más sociable y positiva.
  • No descuides tus revisiones ginecológicas. Debes realizarlas de forma anual hasta los 75-80 años, en que empieza a disminuir el riesgo de cáncer de pecho y de ovario. A partir de esa edad, se pueden espaciar algo más, pero consulta siempre antes a tu ginecólogo.