La tosferina en España ha experimentado un aumento en los últimos meses. Se trata de una infección respiratoria muy contagiosa. En los adultos suele provocar síntomas leves, pero en los bebés puede ser grave si no han sido vacunados –la vacuna se administra a partir de los dos meses, junto a la del tétanos y la difteria– o la madre no se ha vacunado durante el embarazo.

Según los expertos, este brote epidémico no es algo raro y puede ocurrir incluso en países en los que hay un elevado índice de vacunación, como el nuestro, porque el efecto protector de la vacuna va disminuyendo con el tiempo. Por ello se recomienda a todas las mujeres embarazadas que se vacunen para proteger a su bebé, ya que así le transfieren anticuerpos a través de la placenta. En este post respondemos a algunas preguntas clave, de acuerdo con la información que han facilitado las autoridades oficiales:

Si estoy embarazada, ¿cuándo me puedo vacunar? A partir de las 27 semanas de gestación, aunque preferiblemente entre la 28 y la 32, que es cuando se transfieren más defensas. Solo se aplica una dosis. Se debe vacunar en cada nuevo embarazo independientemente de si se ha vacunado en un embarazo anterior.
¿Dónde puedo acudir para ponérmela? Puedes pedir a tu médico o ginecólogo que te la prescriba para aplicártela en un centro de salud. En nuestro centro también puedes ponértela.
¿Es seguro ponérsela durante el embarazo? Sí, se trata de una vacuna que no puede producir la tosferina y que es segura durante el embarazo.
Si una embarazada tuvo la enfermedad durante la infancia ¿debe vacunarse? Sí, haber padecido la enfermedad no comporta un nivel suficiente de defensas para proteger al recién nacido.
¿Es posible vacunarse contra la tosferina, la gripe y la COVID 19 al mismo tiempo?
Sí, las tres vacunas pueden administrarse en la misma visita de seguimiento del embarazo. También se pueden administrar de manera independiente, sin que sea necesario esperar un intervalo determinado de tiempo entre la aplicación de una y otra. SI tienes dudas, consulta a tu ginecólogo/a.
¿Cómo se transmite la tosferina? Por contacto directo con las secreciones respiratorias de personas infectadas, a través la tos y los estornudos.
¿Cuáles son los síntomas? Al principio es parecida a un resfriado: puede cursar con fiebre no muy alta (38oC) y tos ocasional. Desde que una persona se contagia hasta que aparecen los síntomas suelen pasar de 7 a 10 días, aunque a veces pueden llegar a pasar hasta 21 días. Pero en los adultos los síntomas son diferentes a los que pueden presentar los bebés y niños.
¿Cómo afecta a los bebés? En los adultos pueden aparecer accesos de tos rápidos y violentos unas semanas después de haber contraído la infección. En cambio, muchos bebés con tosferina no tienen casi tos, pero pueden presentar dificultades para respirar y pausas en la respiración, lo que puede provocar la muerte. Por ello es muy importante proteger a los menores de 3-4 meses, que todavía no han podido recibir la serie primaria de la vacuna.
¿Cuándo se puede aplicar la vacuna a los bebés? El calendario de vacunación vigente incluye vacunar de tosferina en las edades de 2, 4 y 11 meses (vacuna hexavalente), con un refuerzo a los 6 años.
¿Qué inmunidad confiere la vacuna? La vacuna, a pesar de ser muy eficaz, no lo es al 100%. Aun así, evita mucho la transmisión y si una persona vacunada enferma, los síntomas son mucho menos graves. La vacuna protege sobre todo de casos graves en los bebés, que son los más vulnerables.

Más información

Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad:
Preguntas y respuestas sobre la vacunación de tosferina en embarazadas
Generalitat de Catalunya:
¿Qué te interesa saber de la vacuna contra la tosferina?