Lo que hemos vivido estos días ha sido volver atrás en el tiempo. Hace justo un año estábamos viviendo una situación crítica por un virus que haría cambiar la humanidad entera y justo esta misma semana, que se cumple un año de la pandemia, hemos tenido que vivir un estado nuevamente crítico para Dexeus Mujer, también por un virus, pero esta vez por culpa de un virus informático.

El martes se volvió a parar la actividad en el centro. A las 9:30 de la mañana pasaba por delante del Call Center cuando oí a alguna compañera que decía “Meri, problemas”. Yo me dirigía a una reunión con Ricard Sabartés, mi compañero de Dirección médica, que no se llegó a hacer porque enseguida empezaron a sonar todos los teléfonos. Al principio, como algunos parones que ya habíamos vivido, que “a ver cuándo se recupera”, “es general”, “¿se puede visitar?”, “¿afecta a la parte asistencial?”, toda una serie de preguntas para ver el alcance de la situación, tomar las medidas oportunas y poner en marcha los planes de contingencia, en caso que se alargara la situación.

Pero al poco rato, ya de primera información de Domènec, el Director de Sistemas, supimos que era un ciberataque contra toda la red. Había entrado un virus informático que podía hacer desestabilizar todo el sistema. Por eso, y en primera instancia, se puso en marcha el plan de contingencia de seguridad de IT, que fue apagar y cerrarlo todo para que no hubiera posibilidades de seguir teniendo posibles vías de entrada a los ataques continuados.

Y nos vimos otra vez en una situación parecida a la de hace un año: reuniones de crisis para determinar actuaciones de contingencia, puesta en marcha de protocolos especiales de visita, adaptaciones para poder hacerlo todo en papel, sin ningún ordenador, mucha tensión pero con control… y todo para poder minimizar el impacto y seguir dando servicio realmente a lo que nos dedicamos, dar una asistencia médica a nuestras pacientes dentro de la medida de lo posible.

Sí, nos vimos obligados a suspender algunos servicios, como las pruebas de la revisión anual, pero podíamos seguir realizando todas aquellas visitas imprescindibles: embarazo, oncología, patologías, reproducción, pre y postcirugía, etc.
Hace poco que me dedico a la experiencia paciente como tal, pero llevo años con la comunicación de pacientes y desarrollando el CRM para dar el mejor servicio en innovación, digitalización y experiencia paciente. Por eso, pusimos la maquinaria en marcha y pudimos comunicar a todos los afectados tanto externa como internamente. Pensamos que lo mejor era ser transparentes y poder informar a nuestras pacientes lo que estaba pasando de primera mano. ¿Pero cómo comunicar si nuestros sistemas estaban inaccesibles? Por suerte, y gracias a que tenemos una aplicación externa para el envío de mails, pudimos duplicar el último envío a las mismas direcciones que habíamos mandado hacía unos días, no era lo más concreto, pero era lo único que teníamos para avisar a nuestras pacientes, además de la web y las redes sociales que eran lo único que manteníamos activo. Estas herramientas son imprescindibles para poder llegar a todo el mundo y hacer de altavoz de nuestros comunicados.

Asimismo, por otro lado, me gustaría transmitir un mensaje de tranquilidad, nos vamos a recuperar de esta situación, no hemos tenido a priori fuga de datos de ningún tipo y no hemos perdido tampoco datos, por lo que no se han visto comprometidos los mismos. Estamos trabajando con expertos en ciberseguridad informática, consultores de la Generalitat, gente muy experta en este campo que nos está ayudando a controlar la situación. Se van a hacer todas las actuaciones que se requieran legalmente, entre ellas denuncia policial o la comunicación a la Agencia Española de Protección de Datos. Poco a poco vamos a ir recuperando servidores y servicios, este fin de semana ya hemos tenido buenas noticias de recuperación de aplicaciones médicas y también la app de pacientes ya está en funcionamiento otra vez. Vamos a hacer todo lo necesario para estabilizar la situación lo antes posible.

En este sentido, quiero hacer público el reconocimiento, sacarme el sombrero y hacer la ola a todo el equipo de Sistemas de Dexeus Mujer, sois unos cracks, grandes profesionales. Ha habido momentos de tensión, caras largas, noches de insomnio, dormir poco, entusiasmo y optimismo que se han visto frustrados, pero siempre avanzando hacia adelante, y nunca tirando la toalla. Siempre he tenido un cariño especial a IT (quizás porque siempre me ha gustado la tecnología e incluso llegué a cursar 1º de carrera de informática) pero hoy más que nunca me siento agradecida de todo el trabajo que se hace desde este departamento para volver a recuperar la normalidad, que es todo lo que necesitamos, “bendita normalidad”, que hemos aprendido tanto en este año que llevamos de COVID-19.

También quiero agradecer a todo el equipo de profesionales de Dexeus Mujer que se han implicado en lo que sea para poder seguir adelante estos días, volviendo a visitar en papel, organizando las pacientes, organizando los circuitos internos para seguir dando servicio, informando en los accesos, informando en los teléfonos (es también de las pocas cosas que sí funcionaban), acompañando a pacientes, apuntando las visitas a mano, adaptándose a hacer cualquier cosa que sea de ayuda, pasando listados de visitas… Todo esto se trata de personas, y las personas son las que realmente hacen que esto salga adelante, la gran familia Dexeus Mujer, incluyendo a las personas que acuden al centro a visitarse, por su comprensión y adaptación a todo lo que nos ha pasado, son nuestra razón de ser, por todas ellas hacemos lo que hacemos.

Y todo esto en medio de la segunda dosis de vacunación contra el coronavirus de todo el personal. Es una paradoja, que estando vacunado todo el personal hayamos sido atacados por un virus de tipo informático, de momento sin vacuna… que nos ha hecho ingresar en la UCI, pero que seguimos luchando y del cual vamos a salir más reforzados que nunca.

Este es mi testimonio y mi punto de vista de cómo lo he vivido yo, no pretende ser un comunicado de empresa ni oficial, solo una opinión personal de mi experiencia vivida estos días.