Los expertos en nutrición aconsejan incluir en la dieta diaria al menos 5 raciones de frutas y verduras. Pero a veces resulta complicado si comes fuera y para desayunar no tienes mucho tiempo ni la costumbre de tomar fruta. Así que una buena idea es tener siempre en casa verduras y hortalizas de temporada, como calabacín, puerros, tomate o calabaza, para elaborar cremas o purés ligeros, que aportan muchas vitaminas, minerales y otros nutrientes que cuidan nuestra salud. Además, son muy fáciles de preparar y si les añades unos daditos de pan tostado, unas gotas de aceite de oliva virgen extra, semillas de sésamo o alguna especia o hierba aromática se convierten en un plato gourmet.  

En esta receta te proponemos elaborar un puré de puerros y calabacín, que puedes preparar en menos de 30 minutos, y que además de ser un plato muy saludable, es reconfortante y se puede servir como entrante o para acompañar y enriquecer un plato de pescado. Así que te permite disfrutar de una cena de 10 en menos de media hora.

Aunque se puede encontrar durante todo el año, la temporada del puerro se inicia en otoño y finaliza en primavera.  Es un alimento muy rico en fibra, y bajo en calorías. Contiene folatos y vitaminas C, A y B6. Los folatos son nutrientes que forman parte del complejo de la vitamina B. Contribuyen a la formación normal de células sanguíneas. 150 g de puerro aportan casi el 50% de la ingesta recomendada de esta vitamina. También contiene potasio, fósforo, calcio y hierro, pero al ser un alimento de origen vegetal, estos dos últimos minerales no se asimilan tan bien, porque la fibra interfiere en su absorción.

El calabacín es rico en vitamina C y potasio, y contiene mucílagos, que confieren  a  esta  hortaliza  propiedades  suavizantes sobre el aparato digestivo, por lo que —al tratarse de un alimento fácil de digerir y con ligero efecto laxante— resulta adecuado en caso de problemas digestivos (dispepsia o mala digestión, gastritis) y estreñimiento. Hay que escoger preferiblemente ejemplares no muy gruesos, para que contengan menos semillas. Su mejor época de recolección es de noviembre a agosto.

Ingredientes (para 2 personas)

  • 300 g de calabacín
  • 120 g de puerros
  • 85 g de patata
  • 1 diente de ajo
  • 30 ml de aceite de oliva virgen extra
  • 2 vasos de agua o de caldo vegetal suave
  • sal
  • Pimienta negra

Elaboración

1. Pela y limpia bien los puerros con agua para eliminar toda la tierra. Córtalos en rodajas. La parte verde no la incluyas.

2. Pela la patata y el calabacín en pequeños dados

3. En una cazuela ancha, vierte el aceite de oliva y dora un poquito el diente de ajo a fuego suave. Retira el ajo antes de que se tueste.

4. Añade el puerro y deja que se rehogue la mezcla a fuego lento durante 8 minutos, hasta que tenga una apariencia semi transparente

5. Añade la patata troceada y remueve la mezcla durante 5 minutos más.

6. Incorpora el calabacín y deja que se cueza durante unos 5 minutos más.

7. Añade el agua o el caldo de verdura. Tiene que cubrir por completo los vegetales. Salpimenta y deja que se cueza a fuego medio durante 25 minutos.

8. Tritura la mezcla con una batidora, directamente en la olla, hasta obtener una textura homogénea y sin grumos.

9. Sirve el puré en platos hondos o un cuenco y añade el pan tostado, un poco de pimienta negra y unas hojitas de albahaca fresca. 

¡Buenísima!