Si estás intentando quedarte embarazada y te han diagnosticado una baja reserva ovárica, es probable que intuyas que algo no va bien. Pero no te alarmes. Se trata de un problema cada vez más frecuente debido al retraso de la maternidad. Y sí, afecta a la fertilidad, porque indica que el número de óvulos que potencialmente pueden madurar y ser fecundados está por debajo del nivel que se considera “normal”. Pero eso no significa que no puedas ser madre. En este post, el Dr. Nikolaos Polyzos, que trabaja en nuestro centro y es uno de los mejores expertos europeos en este tema, responde a 10 dudas frecuentes.

  1. ¿Cuál es la causa? La edad de la mujer es determinante, y la relación es inversamente proporcional: a mayor edad, menor reserva ovárica. Pero este problema también puede afectar a mujeres jóvenes, como ocurre en los casos de fallo ovárico prematuro. Otras causas posibles son: tratamientos médicos o quirúrgicos, quimioterapia, contaminación ambiental, hábitos de vida poco saludables y algunas enfermedades, como la endometriosis.
  2. ¿Cómo se detecta? Se puede averiguar fácilmente. Basta con hacer una ecografía transvaginal, entre el tercer y quinto día del ciclo menstrual, para hacer un recuento de los folículos que contiene cada ovario, y un análisis de sangre, para conocer los valores de diversas hormonas: la hormona folículo estimulante (FSH), que libera la hipófisis y se ocupa de activar los ovarios, la hormona antimülleriana (AMH), que libera el propio folículo ovárico, y el estradiol. Estas dos últimas están relacionadas con el proceso de desarrollo de los óvulos. Un valor alto de la primera (FSH) indica una baja reserva ovárica baja, ya que su nivel aumenta cuando detecta que hay pocos óvulos. Y, al revés, un valor alto de la AMH y del estradiol, en general, indican una buena reserva ovárica, ya que es una señal de que hay muchos óvulos en proceso de maduración.
  3. ¿Qué se considera una reserva ovárica baja? En general, un recuento igual o inferior a 4 ovocitos por ovario, o de 7 en total (sumando los de ambos ovarios) y niveles bajos de la hormona AMH (inferior a 1 ng/ml) son indicadores de baja reserva ovárica.
  4. ¿Cómo afecta a la fertilidad? Las posibilidades de quedarse embarazada utilizando los propios óvulos se reducen, pero lo que más influye al final es la edad. Si tienes una baja reserva ovárica, pero menos de 35 años, tus posibilidades son mayores que si tienes más de 40. Por ello, aunque todavía no te plantees ser madre, y tengas solo 30 años o menos, pide a tu ginecólogo/a que te haga una valoración, con el fin de que puedas planificar mejor la maternidad.
  5. Si soy joven pero todavía no quiero ser madre ¿debería preservar? Es algo que debes valorar con tu ginecólogo/a. Pero es una opción que, en cualquier caso, nunca hay que descartar de antemano, ya que ser joven es una ventaja, porque tus óvulos son de mayor calidad.
  6. ¿Es normal tener una baja reserva ovárica a los 40 años? Es normal que disminuya la reserva ovárica, pero no todas las mujeres de 40 años tienen una “baja reserva ovárica”. Por ello cada caso debe estudiarse siempre de forma individualizada.
  7. Si quiero ser madre y tengo este problema, ¿debo optar necesariamente por la reproducción asistida? Depende de la edad que tengas y la causa que lo haya provocado. Si el motivo es un fallo ovárico prematuro o un tratamiento de quimioterapia sí, porque es la única opción en estos casos y es probable que, si no has preservado, sea necesario recurrir a la ovodonación. Si el problema se debe a tu edad, pide a tu ginecólogo/a que te indique qué opciones tienes y, a partir de ahí, decide conjuntamente cuál puede ser la mejor para ti.
  8. Tener una baja reserva ovárica ¿también disminuye la tasa de embarazo en FIV? No necesariamente. En general, se suele obtener un menor número de ovocitos y de embriones viables, pero hay mujeres con baja reserva ovárica que responden bien a los tratamientos de estimulación hormonal y ofrecen óvulos de buena calidad. El problema añadido, como siempre, es la edad, porque si la madre tiene una edad avanzada, sus óvulos son de peor calidad y también hay un mayor riesgo de alteraciones cromosómicas y de fallos de implantación.
  9. ¿Es recomendable realizar varios ciclos de estimulación ovárica en estos casos? Actualmente no existe ningún tratamiento que mejore la reserva ovárica. Se están estudiando, pero de momento todavía son experimentales. Los tratamientos de estimulación hormonal tienen como objetivo aumentar el número de ovocitos que podemos obtener, pero no todas las mujeres responden igual. Por ello, hay que valorar cada caso.
  10. ¿Cuándo está indicado optar por la donación de óvulos? Cuando los ovarios no producen óvulos viables o los óvulos que se obtienen no reúnen la calidad suficiente como para poder ser fecundados y llevar a cabo un embarazo. La ventaja de la ovodonación es que aumenta considerablemente las posibilidades de lograr una gestación frente al uso de los propios óvulos, aunque la madre ya haya cumplido los 40: actualmente la tasa de embarazo con ovodonación gira en torno al 60% frente hasta el 30% que ofrece una FIV utilizando los propios óvulos en mujeres de edad avanzada.